SANTA BÁRBARA, HONDURAS. Una mujer y su hija fueron atacadas a machetazos ayer, sábado, en el barrio El Portillito, municipio de Atima, zona occidental del territorio nacional.
El hecho sangriento dejó como resultado la muerte de la fémina adulta, mientras que la menor de edad, de 17 años, continúa siendo atendida por médicos en un centro asistencial de ese sector.
La víctima mortal respondía al nombre de Cándida Soriano, mientras que su hija se identificó como Danuvia Soriano, según información dada a conocer por la Policía Nacional de Honduras.
Las autoridades policiales informaron que todo ocurrió cuando la madre y la hija se encontraban al interior de su humilde vivienda, de pronto, fueron sorprendidas por hombres que ingresaron y las atacaron a machetazos, matando a una de ellas casi de forma inmediata.
De momento se desconoce el móvil de crimen y quiénes fueron las personas que lo cometieron. En ese sentido, al Dirección Policial de Investigaciones (DPI) está indagando en torno al suceso para esclarecer las causas y atrapar a los responsables.
Pese a las saturaciones policiales que la Policía ha hecho en toda la zona, aún no se reporta la detención de ninguna persona sospechosa.
Otro hecho violento cometido con machete
La Policía Nacional (PN) confirmó la captura de un individuo que a machetazos mató a su primo, frente a la casa de su propia abuela, en la colonia Japón del municipio de Choloma.
El sospechoso estaba interno en el Hospital Mario Catarino Rivas, pues luego de haber cometido el crimen, los vecinos del sector intentaron lincharlo, sus familiares lo rescataron y posteriormente lo entregaron a la Policía, quienes lo llevaron al centro asistencial.
El malhechor fue identificado con el nombre de José Luis Dubón, quien atacó a machetazos a su primo Eduardo Antonio Orellana Carvajal, de 17 años.
Tenía problemas mentales
De acuerdo con los parientes de la víctima, José Luis Dubón padece de problemas mentales. Ellos lo ayudaban dándole trabajos para que se mantuviera ocupado.
El padre del occiso dijo que Dubón andaba en una bicicleta y solo se bajó para atacar a su primo y no entiende qué fue lo que pasó.
«Nosotros mismos como familiares lo rescatamos porque otras personas lo querían linchar. En medio de nuestro dolor le salvamos la vida y lo entregamos a la Policía. Sabemos que mi sobrino tiene problemas mentales, pero nunca nos imaginamos que haría algo así», dijo el padre del fallecido.
El jovencito Eduardo Orellana era jugador de fútbol en el equipo Atlético Japón de su colonia. Según sus parientes, este año comenzaría su carrera profesional en un colegio de Choloma.
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