TEGUCIGALPA. El dirigente de los indignados Ariel Varela, confirmó en exclusiva a Tiempo Digital que hay fuertes amenazas contra su vida y la de su familia pero de momento no ha pedido asilo político a ningún país del mundo y continua en Honduras.
Las declaraciones surgen luego de las versiones de varios medios de comunicación donde trascendió que Varela viajó junto a su esposa y sus hijos aprovechando la mediación de la Unión Europea (UE) que le gestiona una visa por asilo político ya sea en Francia o Alemania.
“No he pedido asilo en ningún lugar, y las amenazas en mi contra se recuperan en un informe de más de 100 páginas dirigido a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)”, Varela también dejo claro que él no tiene nada que ver con la Unión Europea.
Ariel Varela reitera que hay fuertes amenazas en su contra
Añadió que “incluso diputados del Congreso Nacional nos enviaron amenazas veladas en mensajes intimidatorios, esto es una secuencia de hechos que nos indican una situación de alto riesgo”.
De acuerdo con Varela “las amenazas y acciones en contra de nuestra persona incluyen al equipo de coordinación de los Indignados y a mi hijo”.
Luego de la información que indicaba que el lider de los indignados habia salido el país, las criticas a esa decision tomada por Ariel Varela, no se han hecho esperar. Según varios comentarios en las redes sociales, el joven se habría aprovechado de la beligerancia que provocó el surgimiento del movimiento hondureño «Los Indignados» para su beneficio.
No obstante, ahora Varela reveló que no ha salido del país, pero tampoco descarto la posibilidad de poder hacerlo en el futuro.
Indignados surgieron en 2015
Los indignados comenzaron a protestar en mayo de 2015 en las principales ciudades del país con “marchas de las antorchas”.
Tras el surgimiento de “Los Indignados” exigen el cese de la corrupción e impunidad en Honduras, con protestas en las calles.
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Cansados de tanta impunidad y tras un millonario desfalco en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), descubierto hace dos años, un puñado de jóvenes surgió como el Movimiento Oposición Indignada para exigir el cese a la corrupción en Honduras.
Según este movimiento de protesta, la corrupción en Honduras es un problema que data de años y que ha echado raíces en muchos sectores, para empezar en el Gobierno.
