TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La Junta de Dirección Universitaria (JDU) presentó el informe sobre el ajuste al presupuesto de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) que se aprobó para el 2022.
Según autoridades de la UNAH, la Secretaría de Finanzas (SEFIN) aprobó 4,869 millones de lempiras, un monto similar al del 2021. Eso, pese a la disminución de los ingresos propios de la institución durante la actual pandemia de COVID-19.
“Aparentemente si se compara el presupuestario aprobado para el 2022 con el de 2021, se puede ver que hay un incremento de 151.9 millones de lempiras. Sin embargo, SEFIN considera la misma cifra proyectada en años anteriores por ingresos propios que generaron los diferentes servicios que brinda la universidad”, lamentó Carlos Alberto Pérez, presidente de la JDU.
«Si consideramos que en el 2020, de los 250 millones proyectados como ingresos propios, apenas logramos recaudar 87 millones, que representan el 35 %, vemos que SEFIN considera que la Universidad va a generar 250 millones de ingresos propios. Entonces, ese supuesto incremento de 151.9 millones es ficticio, de tal forma que para el año 2022 la Universidad no podrá ejecutar de forma normal el plan operativo anual con el mismo presupuesto del año 2020″, advirtió el académico.
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Tendrán que reorientar sus escasos recursos
En ese sentido, dijo que tendrían que reorientar sus escasos recursos asignados y priorizar los proyectos con el fin de no permitir un atraso en el desarrollo del proceso académico.
La información que envió SEFIN y que compartieron durante la sesión ordinaria del Consejo Universitario, señala que los incrementos proyectados para el 2023 y 2024 rondan entre un 3 % y un 3.5 %.
No obstante, los expositores resaltaron que durante los últimos 10 años, la UNAH ni siquiera ha recibido el 6 % que constitucionalmente le corresponde. Una brecha que incrementa año con año.
“Tenemos estadísticas desde el 2006 hasta la fecha y definitivamente nunca nos han transferido el 6 %. Consecuentemente, el año que viene va a tener las mismas características que este. Eso quiere decir que tendríamos que reestructurar o re-perfilar las finanzas”, argumentó Juan Carlos Ramírez, director de la JDU.
Limitaciones presupuestarias
De igual forma, recordó que, durante los últimos años la UNAH, invirtió entre 3,000 y 4,000 millones de lempiras en proyectos de infraestructura. Por su parte, el costo del mantenimiento de esos proyectos es de aproximadamente el 5 % de su valor.
Igualmente, a las limitaciones presupuestarias se suma la falta de periodicidad de las transferencias, mismas que en la actualidad solo cubren lo correspondiente al pago de sueldos y salarios. Esa situación imposibilita la reactivación de algunos servicios como los que presta la Facultad de Odontología.
Del presupuesto aprobado para el 2020, la SEFIN aún adeuda 460.1 millones de lempiras, señaló Ramírez.
Al respecto, el también miembro de dicho órgano administrativo de la alma máter, Efraín Díaz Arrivillaga, resaltó las dificultades institucionales para cumplir con el pago de prestaciones a exempleados que se retiraron a partir del año 2017.
También expuso sobre el reajuste salarial del 4.1 % por inflación, más 2 % por años de servicio al personal activo. Del mismo modo, mencionó el retorno a la presencialidad de aquellas carreras que tratan directamente con pacientes.
Abstenerse de solicitar contrataciones injustificadas
Ante ello, recomendó a los miembros del cuerpo rectoral hacer conciencia a sus colaboradores sobre la necesidad de abstenerse de solicitar contrataciones injustificadas.
Del mismo modo, informó que el pleno de la JDU tomó la decisión de contratar un actuario que permita realizar proyecciones a varios años. Sobre todo, en materia de planillas laborales.
«Ni siquiera sabemos cuanto es el 100 % porque cuando se habla con las autoridades del Estado, sacan cuentas diversas. Ellos piensan que tenemos que debemos justificar absolutamente cada uno de los desembolsos que se hacen. También creen que nos tenemos que sentir satisfechos con que nos honren sueldos y salarios y servicios públicos», criticó.
De su lado, el rector Francisco Herrera dijo que la UNAH requiere de esos recursos para sostener el proyecto académico del país.
«Somos una universidad que tiene una enorme cantidad no solo de mantenimiento de su infraestructura, sino de planificación y creación de ese futuro inmediato en el cual incursionamos para resolver los problemas que el país tiene”, finalizó Herrera.
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