HONDURAS. Luego de que varios diputados del Congreso Nacional han salido embarrados en supuestos actos de corrupción en el sonado Caso Pandora, diferentes sectores y analistas sociales hondureños consideran que es urgente llevar a cabo una reestructuración efectiva en ese Poder del Estado.
Los desproporcionados aumentos salariales, las abruptas reformas de leyes, y los continuos requerimientos fiscales por corrupción que los salpican. Son las cosas que han deteriorado la imagen de los diputados, y la institucionalidad del CN.
En ese sentido, analistas aseguran que el CN necesita una catarsis (purificación o eliminación). Y una reingeniería para recomponer su imagen ante la sociedad hondureña.
Omar García, analista social considera que los diputados señalados por la Ufecic-MACCIH, deben de renunciar. Eso, porque no pueden sacrificar la institucionalidad del CN por ellos.
García es del criterio que en nombre de la institucionalidad, los diputados señalados en Caso Pandora deben ser “sacrificados”.
Lo anterior, porque tienen problemas legales con respecto a su idoneidad de la procedencia y manejo de dineros públicos.
Por su parte el analista, Rolando Sierra, asegura que se debe seguir trabajando para que el CN recupere la credibilidad perdida.
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Rasel Tomé: “Tiene que venir Pandora dos, Pandora tres…”
A criterio de Sierra se debe continuar investigando a las personas que están señaladas en esos casos de corrupción. Para que así lleguen los procesos verdaderos de judicialización y condena si así es.
De su lado, Rasel Tomé, dirigente político aseveró que muchas investigaciones apenas comienzan en el CN con el caso Pandora.
“Tienen que venir Pandora dos, Pandora tres y tienen que seguir todos los demás casos. Eso permitirá a la población hondureña aplicar justicia que nos ha llevado a la pobreza”, expresó Tomé.
Los analistas concluyen que para lograr la confianza del pueblo, el CN debe revisar la idoneidad de los diputados. Eso, de todos los partidos políticos aglutinados en la Cámara Legislativa.
Asimismo, coinciden en que lo más importante no es juzgar los casos revelados del CN, sino recuperar los fondos despilfarrados. Fondos que estaban destinados para proyectos agrícolas y sociales.
