Tegucigalpa, Honduras. En uno de los quirófanos del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), le amputaron la mano derecha a un joven después de que le explotara un mortero en el occidente del país.
El hecho ocurrió la mañana de ayer en el municipio de Yamaranguila, Intibucá, al suroccidente de Honduras. La víctima fue identificada como David Ricardo Mejía de 29 años de edad.
De acuerdo a la información, Mejía es un miembro de la Policía Nacional de Honduras. Este, según se conoció se encontraba de día libre, y aprovechó a quemar un poco de pólvora que tenía.
El uniformado nunca imaginó que su día de descanso se convertiría en tragedia. Ya que después del accidente, el uniformado fue trasladado de emergencia a la sala de emergencia del Hospital Escuela Universitario (HEU).
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Amputación de su mano
Por su parte, el médico ortopeda, Juan Ramón Hasbun, explicó que el paciente fue intervenido quirúrgicamente; esto, tras el estallido del cohete con alto potencial detonante.
“Perdió la mano debido a la fuerte lesión”, dijo Hasbun a periodistas que le consultaban sobre este ingreso. Además, indicó que Mejía llegó con poca sensibilidad en su mano, por lo que fue imposible revertir el daño.
La trágica experiencia de David Ricardo Mejía se convirtió en el segundo caso por quemaduras que ingresan al IHSS, tras la manipulación de artefactos explosivos.
Mientras, en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) la noche del 24 de diciembre ingresó a la sala de emergencia una persona de la tercera edad.
“Es una mala experiencia que me ha pasado, jamás pensé que ese cohete se reventaría en mi mano”, lamentó un hombre de 54 años, quien espera una cirugía de amputación de dos dedos de su mano derecha.
En el Hospital Escuela Universitario (HEU) registraron 38 pacientes entre adultos y niños. Personal de la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC) visitó el HEU para aplicar las multas a los padres de familia.
La juez municipal Miriam Reyes, indicó que el año pasado aplicaron cuatro sanciones a los padres. También, remitieron los casos a la Fiscalía Especial de la Niñez del Ministerio Público (MP).