REDACCIÓN. Durante la época de invierno, el organismo pide que se ingieran alimentos en mayor proporción y, sobre todo, con más cantidades de grasa. Pero, ¿es esto lo que el cuerpo necesita?
En estaciones de lluvia y frío continuo, el sistema inmunológico puede verse afectado. Por ende, es imprescindible adquirir hábitos alimenticios que ayuden a reforzarlo para evitar enfermarse muy a menudo.
Al respecto, especialistas en el tema indican que aún en los días más gélidos, la ingesta de frutas y verduras debe ser regular. Debido a que, el cuerpo necesita mantener el calor y adquirir grandes cantidades de vitamina D, directamente de la comida.
¿Qué alimentos se deben comer para cuidar de la salud en invierno?
Tanto los resfriados como la bronquitis, tos y otras molestias respiratorias, son muy comunes en esta época estacional.
Por lo que, para aumentar las defensas naturales de tu organismo es importante preparar un menú equilibrado; donde las frutas y verduras tengan un puesto privilegiado.
A continuación, te detallamos una lista de 10 alimentos que pueden ayudarte a cuidar de tu salud y a combatir ciertas enfermedades:
- Cebollas, ajos y puerros. Este tipo de hortalizas contienen propiedades que trabajan contra los gérmenes, desde las bacterias como los virus.
- Por ser muy rica en betacaroteno, provee al cuerpo de mucha vitamina A. La cual, es esencial para mantener las mucosas en buen estado y reducir los riesgos de infecciones respiratorias.
- Acelgas y espinacas. Más allá de la fibra y folatos, aportan al organismo betacaroteno y vitamina C; las cuales, ayudan a aliviar la tos y a mantener la mucosa bronquial. Además, el zinc de la espinaca refuerza directamente al sistema inmunológico.
- Brócoli. Esta verdura también posee vitamina C, misma que, se encarga de aumentar las defensas del organismo.
- Kiwi, limón, mandarina y naranja. Las frutas de “invierno” son ricas en vitamina C, un antixidante natural que protege a las células de los radicales libres.
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- Jalea real. Recientemente, se descubrió que la jalea real representa un alto contenido de vitaminas del grupo A, B, C y E. Asimismo, es muy beneficiosa por el aporte de minerales como calcio, hierro, fósforo, entre otros.
- Productos lácteos fermentados. En este caso, el yogur o el kéfir, contribuyen a elevar las defensas inmunológicas ya que poseen probióticos: una sustancia importante en la lucha contra las infecciones.
- Leche. Incorporarla en la dieta diaria es necesario para proveer al cuerpo de vitamina D.
- Agua. Durante los días fríos se suda menos y, por lo tanto, se tiene menos sed. No obstante, las personas deben hidratarse constantemente; por lo que, se recomienda beber al menos dos litros de agua diarios.
- Pescado. Al igual que los otros, representa una gran fuente de vitamina D. La cual, se adquiere en menos cantidades cuando no se está expuesto a los rayos del sol.
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