TEGUCIGALPA, HONDURAS. El alcalde de Langue, departamento de Valle, Luis Guerra, anunció que ha vencido la COVID-19 después de un mes de cuarentena domiciliar para recuperarse del virus.
Tras recibir la prueba negativa de COVID-19 confirmando su mejora sustancial de salud, señaló que está listo para continuar con las actividades enfocadas a contrarrestar la pandemia
«Estamos satisfechos dando gracias a Dios y a nuestro querido pueblo de Langue por las muestras de solidaridad. Ya estamos activos, nos reincorporamos de nuevo a labores en nuestro municipio de Langue», dijo el edil.
Asimismo, comunicó su gesto de solidaridad con el alcalde del municipio de Guaimaca, Henry Raudales, quien hace poco contrajo el nuevo coronavirus, diciéndole que con la fe en Dios pronto estará recuperado.
«No discriminemos a las personas que dan COVID-19, eso a cualquiera nos puede pasar. Siempre haciendo un llamado a la población, es difícil el aislamiento, los momentos difíciles al querer abrazar a la familia, seres queridos y amigos, pero en esos momentos, un mensajito, una llamada, un mensaje de solidaridad es muy importante», resaltó Guerra.
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Alcalde de Langue
Por otro lado, el alcalde de Langue, dijo que el confinamiento provoca algunos momentos difíciles. Sin embargo, al tener un compromiso con los seres queridos y la población lo mejor es cuidarse y autoaislarse.
«Hemos vencido esa pandemia, y personalmente hacemos una llamada a la población. Recomendamos a la población cuidarnos más, apretar más las medidas de bioseguridad, porque al abrir el mercado de forma inteligente, hoy tenemos que tener más cuidado», apuntó.
Sobre la re-apertura
La responsabilidad durante la apertura de la economía es crucial, porque con la «reapertura inteligente vamos a salir en manada», agregó. Asimismo, manifestó que las personas que van a empezar a laborar, deben hacerlo sin pasar por alto ninguna de las medidas de bioseguridad establecidas.
«Si no hay nada que hacer hay que seguir en los hogares, esto va para largo, según la OMS, pero hay que empezar a acostumbrarnos. Hay que ver la responsabilidad individual de las personas, esta enfermedad es una realidad», cerró.
