TEGUCIGALPA, HONDURAS. Arnoldo Flores, presidente de la directiva del Colegio Profesional Superación Magisterial Hondureño (COLPROSUMAH), explicó que para retomar las clases presenciales, los docentes de Honduras tienen una exigencia.
Como parte de los requerimientos, solicitan al gobierno que haga efectivo el cumplimiento del «Bono Tecnológico» que han prometido. El cual serviría en caso de que las clases virtuales continúen, así los maestros podrán cubrir sus gastos.
Como junta hicieron un estudio en el que estiman que cada maestro gasta entre 1,000 y 1,500 lempiras; dinero que sale de su salario y se invierte en compra de internet y recargas para celular, que se usan para dar clases y llamar a los alumnos.
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A su vez, Flores expuso, que si se regresa a las aulas, Educación debe invertir, por ejemplo, en elevar de 4,500 a 9,000, los maestros unidocentes. Puesto que cada educador da clases a un promedio de 60 estudiantes.
Asimismo, al estar en una misma aula se corre el riesgo de que la enfermedad del COVID-19 se propague con mayor facilidad. Flores enfatizó en que la inversión por retorno a clases presenciales, deberá ser grande, pues se tendrían que crear nuevas aulas en cada escuela.
De esa forma se ampliará el espacios para que cada una sea ocupada por 15 estudiantes.
¿Padres enviarán a sus hijos?
La junta del COLPROSUMAH aconseja que los centros educativos estén dotados de insumos de bioseguridad y se requiere que se invierta en sistemas de agua potable. El 75 % de los institutos no lo tiene o el suministro llega una vez al mes.
Mientras tanto, aún no se establece fecha para un retorno de docentes y alumnos a sus aulas, sin embargo, el tema de regresar es completo. Muchos padres de familia no están dispuestos a exponer a sus hijos a un posible contagio.
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