TEGUCIGALPA, HONDURAS. En las últimas horas, se arrestó a una mujer en el Aeropuerto Internacional de Toncontín de Tegucigalpa, capital de Honduras.
Melvi Suleyma Cabrera Escoto, traía consigo más de 30 mil dólares americanos adheridos a su cuerpo; los había pegado a su cintura de manera ingeniosa con la supuesta pretensión de burlar la seguridad aeroportuaria.
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Mujer en Toncontín
De acuerdo con el reporte provisto, ella procedía de la ciudad de Houston, territorio de Texas, Estados Unidos. Tras el arribo, caminó por los pasillos del aeropuerto, mientras tanto, los agentes de inspección denotaron que se veía inquieta y nerviosa.
Cuando se detectó la anomalía, se le detuvo y se le llevó al área de guardatura. Allí, se le efectuó con un registro personal -por parte de autoridades mujeres- y se halló que tenía una faja puesta alrededor de su cintura con varios paquetes pequeños.
En cada paquetito se encontró billetes de la moneda extranjera en mención; según la Policía Nacional, el monto total asciende a 30 mil 162 dólares. Eso representa, en el cambio a la moneda local, 741 mil 980 lempiras.
Además, en ese cuarto especial, se le realizó un interrogatorio; en esa entrevista, la sospechosa aseguró que el dinero era suyo y que no lo portaba como parte de una operación para entregárselo a alguien más. Esa versión está ahora bajo investigación.
Se detalló que la mujer aprehendida se dedica al comercio; tiene 48 años de edad y su origen y domicilio está registrado en el municipio de El Porvenir, departamento de Francisco Morazán, zona central del país.
Ahora, Cabrera, junto a la evidencia que se le incautó, será trasladada para ser puesta disposición de la Fiscalía de turno en la capital. Inicialmente, se informó que se le acusaría del ilícito de lavado de activos.
Caso reciente
Es oportuno tener en cuenta que, el martes, se detuvo a otro ciudadano -de 22 años- en la misma terminal aérea; cabe destacar la similitud de los hechos, dado que él también provenía de Houston, Texas.
Al efectuarle el registro personal, a él se le encontró un par de tablets y 18 teléfonos celulares (de diferente marca y modelo) pegados a su cuerpo. Él también afronta ahora un proceso judicial.
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